Conoce tu cámara: Modos de disparo

La «Era Digital» ha hecho que hoy, casi todo el mundo tenga una cámara o en muchos de los casos un teléfono móvil de última generación con cámara integrada.

Por supuesto un profesional que se dedica específicamente al campo de trabajo que necesita su producto, dispondrá de un equipo específico para la realización correcta del producto y su explotación en diferentes medios.

Pero es normal en pequeños negocios el intentar de forma inicial fotografiar o documentar ellos mismos parte del material que se usará para publicitar su producto o su propio establecimiento. ¿Pero qué les pasa a muchos cuando realizan esa fotografía o vídeo? Pues la respuesta es obvia: personas movidas, objetos desenfocados, etc.

La realidad es muy diferente, pues las cámaras compactas, móviles, cámaras réflex o las nuevas mirrorless (Sin espejo) tienen varios modos de disparo: Automáticos o Preconfigurados, pero aunque su nombre sea «modo auto» si no se usan correctamente seremos nosotros los que lo sufriremos a la hora de realizar nuestra fotografía o video.

Imagen de referencia que puede ser diferente según la marca o el modelo

A continuación hablaremos un poco de algunos de ellos, los más comunes:

Automático

El modo más básico y a la vez más usado de los modelos de disparo. El equipo fotográfico debe básicamente autoconfigurarse para darnos la exposición correcta. Es el modo, ideal para situaciones normales. Pero carece de mente propia, por lo que cuando queramos realizar fotografías nocturnas (escasa iluminación) puede darnos fallos de toma. Lo interesante en esos casos es mas recomendable usar los modos Preconfigurados para esa función. Ayudaremos a que la cámara conozca el acabado que esperas de tu foto y el resultado se acerque al esperado.

Retrato

Es el modo ideal para primeros planos (Retrato). Permite esto gracias a que abre el diafragma al máximo, reduciendo la profundidad de campo y que el fondo quede difuminado. Como modo «Automático» que es, el equipo selecciona la velocidad de obturación más adecuada para impedir que el posible movimiento del sujeto retratado pueda influir en que este salga borroso. Algunos equipos mejoran este modo añadiendo difuminados en la piel.

Macro

Aclaremos que es un falso macro. Este modo configura el equipo para retratar en distancias cortas, o tamaño real. La cámara abre al máximo el diafragma, el tiempo de exposición se adecúa con el objeto. Para este modo es recomendable usar una luz externa y trípode.

Paisaje

En comparación a los modos anteriores en esta ocasión el diafragma se cierra lo máximo posible, ampliando la profundidad de campo. Pero es para horas de luz, siendo necesaria mucha luminosidad.

Deporte

Es el modo que para ser más fieles a su función debería llamarse en muchos equipos «captura de movimientos» su uso más característico es inmortalizar eventos deportivos, que suelen requerir una alta velocidad de obturación, pero sólo puede usarse en situaciones muy iluminadas.

Nocturna

El modo para los amantes de los lugares poco luminosos. La cámara abre al máximo la apertura de diafragma a costa de un tiempo de exposición normal, pero sube la sensibilidad del sensor (ISO) dotando a la imagen de un ruido poco estético. Algunas cámaras incluyen la luz flash ayudando a la cámara a que su velocidad sea mayor, reduciendo el efecto negativo de fotos movidas.

Esperamos que os haya sido de utilidad el artículo y os sirva para ayudaros en vuestro negocio, no obstante no olvidéis las limitaciones de vuestro equipo, ni intentéis forzarlo a realizar una toma que solo podría ser tomada con un equipo profesional pues podríais acortar su vida útil.